Las diferentes prácticas en el ámbito espiritual que se realizan hoy en día ofrecen diferentes caminos hacia la curación y bienestar de nuestro cuerpo y mente.
Entre las actividades más realizadas nos encontramos el yoga que nos ayuda a fortalecernos mentalmente y físicamente.
La atención plena que conseguimos nos ayuda a centrarnos, la meditación puede iluminarnos; y la filosofía puede ayudar tranquilizarnos.
Da igual cual sea el camino que escojamos, o el maestro que escuchemos y sigamos, el objetivo principal es el mismo: es logra una sensación de armonía y paz duraderas en nuestras vidas.
Para ayudar a iluminar el potencial de paz en cada momento de vigilia debemos conseguir controlar los cuatro siguientes aspectos.
1. Serenidad/Equilibrio
La armonía de nuestra vida radica en la serenidad y el equilibrio que consigamos con nuestras acciones y pensamientos, el bienestar físico y mental y nuestro mundo interior y nuestra existencia exterior.
Más que una filosofía, la serenidad y el equilibrio es una forma de ser.
La práctica del Yoga nos ayuda a conseguir mantener esa serenidad y equilibrio, así como la meditación, el arte y la vida positiva.
2. La Respiración
Comúnmente se dice que la paz es un suspiro, si pudiéramos recordar esta frase cuando estamos estresados o angustiados, liberaríamos en cierta forma esta sensación.
La práctica de la respiración profunda y pausada, puede ayudarnos a acercarnos a esa sensación de paz y a los ritmos normales de nuestra vida.
3. La Meditación
La meditación nutre nuestro ser interior, la sensación de quietud conseguimos con la meditación nos ayuda a recuperarnos de todas nuestra preocupaciones y problemas externos.
Incluso con buscar tiempo para realizar unos minutos de meditación cada noche, puede ayudarnos a volver a centrarnos y recuperar una sensación de ligereza y tranquilidad en nuestra vida.
4. La relajación
La relajación es un actividad diaria vital para conservar la salud de la mente, el cuerpo y del espíritu.
Si en nuestra vida diaria no podemos encontrar un momento para desconectarnos y relajarnos, esto significa que tenemos que examinar cómo enfocamos nuestra vida.
Para lo que debemos buscar un poco más de espacio para dedicar un tiempo a nuestra vida personal para hacerla más positiva.
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