Mini Tangkha budista de Vajrakilaya

Vajrakilaya es una deidad importante en la tradición budista tibetana, y su nombre se traduce comúnmente como "la daga de diamante". Esta deidad es considerada una manifestación iracunda de la compasión, y su función principal es la de destruir las fuerzas negativas y los obstáculos que impiden el camino hacia la iluminación.

La forma visual de Vajrakilaya suele representarse con tres rostros, seis brazos y cuatro piernas, sosteniendo diversos instrumentos rituales y armas. La daga de diamante (vajra) que lleva en una de sus manos simboliza la purificación y la capacidad de cortar a través de las ilusiones y obstáculos.

La práctica de Vajrakilaya es común en las enseñanzas del budismo tibetano, y se utiliza para purificar tanto las faltas y negatividades internas como las externas. Se cree que la invocación y meditación en Vajrakilaya ayudan a superar los obstáculos en el camino espiritual y a disolver las energías negativas que puedan surgir.

En resumen, Vajrakilaya es una deidad budista tibetana asociada con la purificación y la eliminación de obstáculos en el camino hacia la iluminación. Su práctica es parte integral de las enseñanzas y rituales de algunas escuelas del budismo tibetano.